La UD desprecia al fútbol femenino

La UD Las Palmas siempre se jacta de los convenios y acuerdos con el fútbol base canario. Fotos en el palco o regalo de entradas son alguna de las contraprestaciones que ofrece la entidad presidida por Miguel Ángel Ramírez a las entidades modestas.

Pero uno de estos clubes se ha encontrado con un portazo cuando solicitó ayuda a la UD. Uno de los máximos representativos del fútbol femenino grancanario, el CD Juan Grande, quiso esta semana preparar el partido ante el Málaga en un campo de césped natural y solicitó a la UD Las Palmas entrenar en la nueva ciudad deportiva de Barranco Seco.

En el club sureño no salen de su asombro, cuando la UD les respondió que para hacer uso de la instalación debían pagar un canon. Una instalación privada, es cierto, pero construida con subvenciones públicas que se utilizan para el beneficio de una empresa privada, como pregona el presidente cada vez que tiene oportunidad.

Este menosprecio al Juan Grande es un ejemplo más del desapego de la UD Las Palmas al fútbol femenino, modalidad por la que apuestan muchos clubes pero que los amarillos siguen dando la espalda.